“Si para algo ha servido esta campaña ha sido para demostrarnos que los cuatro que están a codazo limpio para ver quién se sienta en la Moncloa son Guatemala y Guatepeor, pero por duplicado, y que Euskadi y los vascos les importamos un comino. Y si algo tenemos que dejarles claro como Pueblo el domingo es que somos diferentes, que aquí hay alternativa, que aunque la Moncloa caiga en malas manos, aquí habrá una alternativa que defienda Euskadi, que defienda los intereses de todos los vascos. Y esa alternativa es la del PNV”. Con este mensaje claro y directo ha cerrado Andoni Ortuzar, presidente del Euzkadi Buru Batzar, el acto político que EAJ-PNV ha celebrado esta tarde en Barakaldo. Un mitin en el que el lehendakari, Iñigo Urkullu, y el cabeza de lista al Congreso por Bizkaia, Aitor Esteban, también han subrayado lo mucho que nos jugamos los vascos y las vascas el próximo domingo, 20 de diciembre. Entre otras cosas, nuestro bienestar y nuestro futuro como nación. “El domingo Euskadi le tiene que decir ‘no’ a esta legislatura del ‘no’. El domingo pedimos el voto por el ‘sí’ a Euskadi. ‘Sí’ a un programa positivo y constructivo en defensa de los intereses de Euskadi; ‘sí’ a la gestión con rigor y seriedad; ‘sí’ a las Pensiones, a la Sanidad y a la Educación de calidad, a la Protección social y a la solidaridad; ‘sí’ a la economía productiva, a la industria y el empleo; ‘sí’ al futuro económico, futuro social, futuro político de Euskadi; ‘sí’ a seguir creciendo como Nación”, ha afirmado Urkullu.

Ortuzar ha asegurado que, frente al ‘apagón televisivo’ que Euskadi está padeciendo, la ciudadanía vasca no va a votar “con el mando a distancia. Las vascas y los vascos vamos a elegir nuestra propia programación. Vamos a elegir el Canal vasco. Vamos a votar convencidos, no abducidos. Convencidos de que nuestra sintonía es la sintonía de Euskadi. No vamos a votar como si esto fueran las nominaciones de Gran Hermano. Hay que votar ejerciendo de vascos y vascas. Con papeletas que lleven impresas el nombre de Euskadi”. El presidente del EBB ha llamado a la afiliación jeltzale a la movilización (“toca patear barrio a barrio, casa a casa, dando papeletas de Euskadi. Si no lo hacemos nosotros no lo hará nadie”) para que el próximo domingo las urnas sean un fiel reflejo de una realidad, la vasca, que poco tiene que ver con la española. “En Euskadi la crisis también nos ha golpeado fuerte pero hemos sabido aguantar mejor la marejada. Aunque no somos un país idílico, el paro aquí es notablemente menor que en España, y nuestro crecimiento es más sólido porque tenemos un modelo industrial, trabajadores cualificados y emprendedores dispuestos a salir al mundo. Nuestros servicios públicos, la sanidad, la educación, las prestaciones sociales, han mantenido la calidad gracias al rigor presupuestario. Se compensa el gasto farmacéutico a pensionistas y a quienes menos tienen. Se dispone de una garantía de ingresos como apoyo a la dignidad de las personas. Lo reconocía el lunes el portavoz de Podemos, Iñigo Errejón, sobrero de Pablo Iglesias en visita fugaz a Euskadi. ¿Sabéis lo que decía? ‘Miramos con envidia a algunas instituciones de bienestar y de protección social que existen en Euskadi’. Los más ‘progres’ nos tienen envidia. ¡Por algo será! Estamos mucho mejor que España en calidad de vida, en bienestar, en cohesión, en empleo, en oportunidades. Y esa diferencia la hemos amasado entre todos a través del autogobierno. Y esta diferencia de país, de sociedad, está siendo cuestionada por quienes quieren un país uniforme. Y ahí está el riesgo de estas elecciones, un riesgo cierto de recentralización. Un riesgo real de que alguien tenga la tentación de eliminar una parte sustancial de nuestro autogobierno. Hay quien quiere quitarnos el Concierto”. De ahí que el PNV se ofrezca como dique de contención ante esta marea recentralizadora.

El Lehendakari, Iñigo Urkullu, ha proporcionado más argumentos a quienes aún puedan dudar de la conveniencia de votar a EAJ-PNV. “Sabemos que mucha gente quiere votar para que cambie el Gobierno español. El voto al Partido Nacionalista Vasco sirve para cambiar el Gobierno español y, además, sirve también para defender en Madrid el presente y el futuro de Euskadi. El voto al PNV tiene un doble valor: cambio en España y defensa de Euskadi”. En su intervención, Urkullu ha reivindicado que solo el PNV “defiende la agenda de Euskadi en Madrid y tiene un programa con propuestas para conseguir allí lo que necesitamos aquí”. Un partido al que avalan casi cien años en Madrid con dos objetivos: “la construcción económica, social, cultural, política e institucional de Euskadi, y la construcción de la Nación Vasca”. Casi un siglo que se ha saldado con grandes avances como “el respeto a los Derechos Históricos de los Territorios Forales, el Concierto y el Convenio Económico, el pacto estatutario, la institucionalización de Euskadi, la transformación económica y modernización de nuestro País, la puesta en marcha del motor del Autogobierno, fuerza motriz del bienestar y calidad de vida del Pueblo Vasco”. “Aquí no hay privilegios”, ha remarcado Urkullu. “Aquí hay trabajo, colaboración y compromiso. Aquí hay derechos, leyes y pactos. Aquí sabemos lo que significan el valor del trabajo. Sabemos que nadie nos ha venido a reglar nada desde Madrid. Los vascos siempre hemos vivido de nuestro trabajo, y solo sabemos vivir de nuestro trabajo. Lo que somos es fruto de nuestro propio esfuerzo”.

Por su parte, Aitor Esteban, cabeza de lista de EAJ-PNV por Bizkaia en las elecciones del domingo y candidato a la reelección, ha destacado que “va a haber un antes y un después en estas elecciones” y ha recordado que “la probable recentralización no es la solución para Euskadi”. Por ello, tras señalar que “el autogobierno ha sido bienestar”, ha pedido una “voz propia en Madrid para defender lo nuestro, nuestras competencias, el euskera, nuestra Ertzaintza, nuestra administración, la capacidad de crear riqueza, el Concierto Económico”. “En definitiva, debemos tener una presencia vasca directa en Madrid para dejar claro, como siempre lo hemos hecho, que aquí hay una sociedad distinta, una nación, que quiere autogobernarse”, ha zanjado.